Los especialistas han visto como el uso de pantallas en la infancia se ha ido incrementado en la última década. Esto es debido a diversos factores, la llegada de la tecnología portátil, con dispositivos cada vez más manejables e intuitivos; la posibilidad de acceder al contenido deseado en cualquier instante y una falsa extendida creencia de que los juegos o videos destinados al público infantil pueden servir como sustitutivo al juego manipulativo, interacción social o, incluso, contribuir al desarrollo o estimulación cognitiva del niño por sí mismos. La realidad es que existe consenso sobre la observación de una amplia gama de problemas y dificultades a nivel de desarrollo, cognitivo, sensorial, social, emocional, conductual y familiar derivadas del uso sin control y abuso de las nuevas tecnologías en la infancia.
Se ha observado que:
– Más de 2/3 de los niños pasan más tiempo delante de las pantallas del recomendable.
– Niños menores de 2 años usan a diario dispositivos.
– La forma de entretenimiento más extendida en la infancia está vinculada al uso de dispositivos.
– La situación sanitaria ha disparado el uso de pantallas como fuente principal de entretenimiento en la infancia.
En el post podéis ver algunos de los efectos negativos que más se han reportado con respecto al uso de pantallas en la infancia y cuáles son las principales recomendaciones para regular su uso.